Sabias que ¿un EPI realmente lo es si cumple las siguientes condiciones?

Sabías que
Sabias que ¿un EPI realmente lo es si cumple las siguientes condiciones?

No todo guante o toda gafa es un equipo de protección individual (EPI). Se define EPI como cualquier equipo destinado a ser llevado o sujetado por la persona trabajadora para que le proteja de uno o varios riesgos que puedan amenazar su seguridad o su salud en el trabajo.

No todo guante o toda gafa es un equipo de protección individual (EPI). Se define EPI como cualquier equipo destinado a ser llevado o sujetado por la persona trabajadora para que le proteja de uno o varios riesgos que puedan amenazar su seguridad o su salud en el trabajo.

Son tres las condiciones que un EPI debe cumplir: destinado a ser llevado o sujetado, individual y protección a los riesgos expuestos.

El primer requisito se refiere a que tiene que llevarse y sujetarse (p.e. una pantalla de soldador) por la persona que está expuesta al riesgo. De ahí que, según este criterio haya otro tipo de elementos que no pueden ser considerados como equipos de protección individual, tales como una banqueta aislante, porque no cumple con la acción de “llevarse o sujetarse”.

El segundo requisito exige que el EPI sea usado en el lugar de trabajo, donde es de aplicación la normativa correspondiente, y por el trabajador para su uso personal e individual. Ahora bien, existen situaciones extraordinarias que aplicando las medidas de higiene adecuadas el mismo EPI pudiera ser usado por otra persona.

El tercer requisito se dirige a la empleabilidad del EPI: Se emplea para la protección de la persona trabajadora. En general, este equipo constituye una defensa entre una o varias partes del cuerpo y el peligro, de modo que la condición de su utilización o uso es que proteja a la persona trabajadora frente a un posible riesgo o evite o disminuya los daños derivados de un accidente. Unos guantes de protección química suponen una barrera entre la piel y la sustancia química; un ocular filtrante contra radiaciones evita que se dañen los ojos, etc. Así podríamos halar de múltiples ejemplos.

Los equipos de protección individual se utilizan para protegerse a uno mismo y no a terceras personas. De ahí que por ejemplo mascarillas que se utilizan en determinados ámbitos sanitarios no sea un EPI porque su protección está diseñada para evitar contagios y no para la protección individual de la persona que lo utiliza. Asimismo, la ropa de trabajo que no proteja de ningún riesgo identificado tampoco se considerarán EPI. Es el caso por ejemplo de los uniformes los auxiliares de vuelo o del personal de hostelería. Sin embargo, hay casos de determinada ropa que se consideran EPI, como es el caso de la ropa reflectante del personal de reparación de arcenes. En este caso la ropa facilita la visualización del trabajador/a cuando está realizando sus tareas en la carretera con el fin de disminuir el riesgo de sufrir un accidente.

 

Fuente INSST

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