Practica pausas activas en tu trabajo

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Practica pausas activas en tu trabajo

Estamos acostumbrados a pasar muchas horas trabajando, sentados delante de un ordenador, sin apenas tiempo para realizar ejercicio durante la semana. Para que la falta de tiempo no sea un hándicap, comienza a practicar pausas activas en el trabajo.

Estamos acostumbrados a pasar muchas horas trabajando, sentados delante de un ordenador, sin apenas tiempo para realizar ejercicio durante la semana. Para que la falta de tiempo no sea un hándicap, comienza a practicar pausas activas en el trabajo. Una buena opción para favorecer tu salud en todos los aspectos: a nivel cardiovascular, respiratorio y cognitivo y prevenir dolencias posteriores fruto de malas posturas continuadas. ¡Mas vale prevenir que curar!

Y es que hacer una pausa mientras trabajas para realizar ejercicios terapéuticos, tiene más beneficios de los que imaginas. ¿Quieres saber cuáles son? Disminuye el estrés, reduce la fatiga física y mental, mejora la calidad del trabajo, promueve la relajación muscular y favorece la circulación sanguínea.

Te contamos en qué consisten las pausas activas. Se trata de una rutina corta de ejercicios específicos que no te llevarán más de 10 o 15 minutos, y que se pueden realizar en el mismo espacio de trabajo. Son ejercicios básicos y funcionales, para ejercitar los músculos, ejercicios de movilidad articular, de estiramiento y de relajación.

No dejes de practicar estos ejercicios que te recomendamos:

  • Movimientos circulares de cadera.
  • Estiramientos, elevando hombros hasta los 90° y con el otro brazo ejercer leve presión en los codos.
  • Girar la cabeza hacia un lado hasta que el mentón quede casi en la misma dirección que el hombro. Después realiza este ejercicio girando al otro lado.
  • Inclinar la cabeza hacia atrás y permanecer durante 5 minutos en esta posición.
  • Encoger los hombros hacia las orejas y permanecer en esa posición 10 segundos.
  • Realizar movimientos circulares de tobillo.
  • Estirar los brazos hacia el frente, juntar las palmas y mover las manos hacia arriba y abajo.
  • Realizar ejercicios de relajación que consisten en inhalar y exhalar contrayendo el abdomen y relajando cada parte del cuerpo. La respiración debe ser lo más profunda, lenta y rítmica posible.

Al practicar durante varias semanas las pausas activas, disminuyen los niveles de estrés, favorece la autoestima, mejora la concentración, reduce el riesgo de enfermedades, motiva y mejora las relaciones interpersonales, libera el estrés articular y muscular, y ayuda a realizar mejor tus tareas laborales. ¡Aprovecha ese tiempo de descanso y te sentirás mejor!

 

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