“En la prevención de riesgos laborales no hay descansos que valgan”. Lourdes Iscar, directora general de Osalan

Empresas seguras
“En la prevención de riesgos laborales no hay descansos que valgan”. Lourdes Iscar, directora general de Osalan

Lourdes Iscar, Directora General de Osalan, el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales ha tenido la amabilidad de charlar con nosotros sobre la evolución de la seguridad y la prevención en el mundo laboral en los últimos 30 años, periodo de tiempo que lleva funcionando Osalan. Tras sus respuestas podemos conocer mejor cuál es la situación actual de la PRL y los nuevos retos a los que se enfrenta.

Lourdes Iscar, Directora General de Osalan, el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales ha tenido la amabilidad de charlar con nosotros sobre la evolución de la seguridad y la prevención en el mundo laboral en los últimos 30 años, periodo de tiempo que lleva funcionando Osalan. Tras sus respuestas podemos conocer mejor cuál es la situación actual de la PRL y los nuevos retos a los que se enfrenta.

 

  • Es el 30 Aniversario de Osalan. ¿Cómo se han desarrollado estos 30 años? ¿Cómo los valoraría?

Sin duda, de forma positiva. A lo largo de estos últimos 30 años, Osalan ha ido acompañando a los agentes en su intento de reducir los riesgos asociados al trabajo y de mejorar la salud laboral hasta convertirse, gracias al trabajo, el esfuerzo y la dedicación de muchas personas, en una entidad de referencia en este ámbito.

Para ilustrar esta idea, sólo diré que para desarrollar su actividad, Osalan ha pasado de contar con aproximadamente 6 millones de euros cuando se creó a disponer este año de un presupuesto de algo más de 17,5 millones de euros, que se destinan fundamentalmente a formación, asesoramiento, investigación y prevención de riesgos laborales.

 

  • ¿Cuáles son los principales cambios que se han dado en el mundo laboral en los últimos años? y ¿de qué manera la PRL ha tenido que hacerles frente?

Sin duda, se producen cambios vertiginosos en campos tan diversos como las nanotecnologías, los riesgos asociados a la exposición a campos electromagnéticos, el impacto de la robotización de los sistemas industriales, los riesgos psicosociales, la exposición a agentes biológicos, los materiales inteligentes, el diseño y desarrollo de escenarios de prevención de riesgos en entornos virtuales …

Lo que está claro es que en la prevención de riesgos laborales no hay descansos que valgan. Investigar las nuevas formas de trabajo y los riesgos asociados es, justamente, una de las labores fundamentales que corresponden a los institutos de seguridad y salud laborales. Y en Osalan, así lo hacemos, en constante colaboración con las empresas, con los servicios de prevención, con las organizaciones patronales y con las organizaciones sindicales, en temas como nuevas enfermedades profesionales relacionadas con nuevos materiales, el envejecimiento, el teletrabajo, el acoso, las nuevas plataformas, los riesgos psicosociales, que son situaciones que requieren trabajo, trabajo y más trabajo de prevención.

 

  • ¿Qué evolución se ha producido en la percepción de la prevención por parte de las empresas e instituciones a lo largo de estos años?

En mi opinión, y aunque quede mucho camino por recorrer, se va impregnando el convencimiento de que la consecución de la seguridad y salud laborales, el fomento de la prevención de los riesgos laborales, en definitiva, el derecho de todas las personas a desempeñar su trabajo en un entorno saludable y que contribuya a su bienestar son objetivos que toda sociedad debe perseguir.

Y aunque ha pasado mucho tiempo desde su aprobación, y siendo evidente que necesita una actualización, no quisiera dejar de reconocer que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales de 1995 sentó las bases para que la prevención se extendiera a todas las capas y niveles de los sectores productivos, pasando de ser un servicio limitado a las grandes empresas con sus servicos médicos, etc., a estar a disposición de las grandes y pequeñas, ricas y menos ricas.

 

  • ¿Existe una verdadera cultura preventiva instaurada en Euskadi?

Yo estoy convencida de que cada vez hay una mayor concienciación sobre la importancia de la PRL: lo que me parece la principal evolución en esta materia ha sido la orientación hacia que la sociedad, las empresas, los servicios de prevención, los agentes sociales y las administraciones compartamos estrategias y objetivos y colaboremos a la hora de afrontar permanentemente los nuevos riesgos derivados de los cambios del escenario laboral y social y para abordar la adaptación del trabajo a las nuevas condiciones y capacidades de las personas y de la tecnología.

Pero hay que tener ambición en este sentido, debemos conseguir que la ciudadanía exija condiciones de trabajo seguras y saludables. Esa será sin duda la prueba de que se ha difundido la cultura preventiva a toda la sociedad.

 

  • ¿Ha habido cambios significativos o revolucionarios relativos a la protección de la salud de las personas trabajadoras? ¿Se contempla la preservación de la salud desde una nueva perspectiva?

Yo creo que hay una tendencia cada vez mayor a planificar y ejecutar acciones situando a las personas en el centro, atendiendo a los determinantes sociales que generan desigualdades que se puedan dar por edad, procedencia y otros factores de la persona trabajadora, integrando la perspectiva de género en la PRL así como la participación de todos los agentes en la seguridad y salud laborales. Estas son las bases de la Estrategia Vasca de SST 2021-2026.

 

  • ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta la PRL en la actualidad?

Junto a los riesgos laborales más generales (seguridad vial laboral o riesgos higiénicos, por mencionar algunos) identificamos factores de riesgo específicos vinculados con el uso de las plataformas digitales que se proyecta en ámbitos como la logística, los servicios, la alimentación, el transporte, las mercancías, las finanzas, el aprendizaje, la salud y el bienestar, las instituciones… Hablo de hiperconexión, monitorización, invisibilidad, falta de contacto social, precariedad; de otros relacionados con la organización del trabajo (aislamiento, reputación digital, algoritmos gestores, etc). Todos ellos pueden facilitar la aparición de riesgos psicosociales como el estrés, el acoso sexual o el síndrome de “estar quemado”.

Y no podemos dejar de lado los trastornos músculo- esqueléticos producidos por exposición a riesgos ergonómicos no corregidos. Es necesario trabajar en la prevención de estas dolencias poniendo el foco en el diseño de los puestos de trabajo.

 

  • ¿Cuáles cree que son las claves actuales para la mejora de la prevención de riesgos laborales?

Como digo siempre, lo que es evidente es que, para desplegar una PRL eficaz, es fundamental desarrollar la colaboración entre los agentes y conseguir la integración de la prevención de riesgos laborales en la gestión de las empresas y centros de trabajo. Todo ello, además, bajo la idea de que la prevención del riesgo laboral debe ser vista como un valor de las empresas en el marco de la consolidación de un tejido empresarial sostenible, moderno y competitivo.

En resumen, destacaría el compromiso, la participación y la integración. Es Imprescindible que exista un compromiso de las empresas, las administraciones, la representación de las personas trabajadoras para ir todos en la misma dirección. Es necesario llegar a integrar la prevención de riesgos laborales en la gestión diaria de las empresas.

Y añadiría, que uno de los factores clave es la calidad. Ya no debemos conformarnos con tener los mínimos exigidos por Ley, debemos tratar de que las actuaciones preventivas, evaluaciones de riesgos, planificaciones, vigilancia de la salud, sean de calidad.

 

  • ¿Qué metas cercanas se plantea alcanzar Osalan?

Además de las tan habituales como imprescindibles tareas “tradicionales”, en 2023 vamos a proceder al estudio y desarrollo de un modelo de calidad para la prevención en la empresa; a la revisión de la normativa de PRL para hacer propuestas de adaptación y mejora, en especial para las empresas pequeñas, autónomos y colectivos de más difícil encaje en la situación actual y, además, nos proponemos, entre otras cosas, mejorar la coordinación de actividades en el sector de la construcción; seguir con un sistema de alertas para hacer campañas dirigidas a ámbitos donde las estadísticas nos indiquen que lo necesitan; reforzar el grupo de ergonomía; actualizar el mapa de riesgos psicosociales para conocer la situación de la prevención de dichos riesgos en las empresas de la CAE; colaborar con formación a personal técnico de los ayuntamientos para la realización del censo de amianto y colaborar con los departamentos implicados para su adecuada retirada y eliminación; elaborar un informe sobre siniestralidad laboral y enfermedades profesionales de mujeres y hombres con los datos actualizados de la Encuesta de Condiciones de trabajo-2021 y otras fuentes de datos; y poner en marcha la plataforma virtual para la formación dirigida al personal autónomo.

Son éstas sólo unas pinceladas de la exigente tarea que nos proponemos abarcar y que, como refleja el lema del V Congreso Internacional de Seguridad y Salud en el Trabajo –Asumiendo retos, sumando esfuerzos– exige el compromiso y participación de todas las partes, esto es, empresariado, entidades preventivas, personas trabajadoras, comités de seguridad y salud y personal delegado de prevención, organizaciones empresariales y sindicales y Administraciones Públicas.

 

 

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