Crear un entorno vial y laboral seguro: Señalización de obras fijas en carreteras

Lecciones de seguridad
Crear un entorno vial y laboral seguro: Señalización de obras fijas en carreteras

La señalización de obras fijas en carreteras es esencial para advertir a los conductores y conductoras sobre los peligros y cambios en las condiciones de las carreteras, así como para garantizar la seguridad de los/as trabajadores/as y los/as peatones durante la construcción, mantenimiento o reparación de las infraestructuras viales. Es una medida de carácter preventivo que se utiliza para advertir de los peligros, favorecer comportamientos seguros al volante y proteger la salud y seguridad de las personas trabajadoras.

La señalización de obras fijas en carreteras es esencial para advertir a los conductores y conductoras sobre los peligros y cambios en las condiciones de las carreteras, así como para garantizar la seguridad de los/as trabajadores/as y los/as peatones durante la construcción, mantenimiento o reparación de las infraestructuras viales. Es una medida de carácter preventivo que se utiliza para advertir de los peligros, favorecer comportamientos seguros al volante y proteger la salud y seguridad de las personas trabajadoras.

Una correcta señalización resulta eficaz como técnica de prevención y seguridad, pero no debe olvidarse que por sí misma nunca elimina los riesgos. La señalización adecuada informa a tiempo a los conductores sobre la presencia de obras en la carretera, lo que les permite reducir la velocidad y estar alerta. Ayudando a prevenir accidentes al advertir sobre cambios en el tráfico, como desvíos, estrechamientos de carril o cierres temporales. Sin embargo, una señalización errónea puede agravar aún más los peligros de colisionar o tener un accidente.

Conviene utilizar la señalización de obras fijas en zonas adecuadas y puntuales, para advertir de la presencia de las obras a los conductores con suficiente adelanto para que puedan tener margen de actuación y estar atentos a la hora de disminuir velocidad o tomar otro tipo de precauciones, pero su utilización indiscriminada, a lo largo de muchos kilómetros anteriores, puede llegar a neutralizar o eliminar su eficacia.

Por ello es esencial realizar una buena planificación detallada de la señalización que se utilizará, antes de que comiencen las obras. Esto incluye determinar la ubicación estratégica de las señales, los tipos de señales necesarias y la visibilidad óptima para los conductores en diferentes condiciones climáticas y de iluminación. Por eso, la señalización de obras en carreteras es una labor que requiere de una formación específica para realizar una correcta ejecución.

Existen una variedad de señales particularmente diseñadas para zonas de obras en carreteras, desde señales de advertencia hasta señales informativas y señales de restricción. La selección cuidadosa de estas señales es esencial para comunicar claramente a los conductores los peligros potenciales y las instrucciones que deben seguir.

Se aconseja el uso de conos, vallas, balizamiento y luces intermitentes para marcar el área de trabajo y guiar el tráfico. Así como la colocación de señales de advertencia que indican la proximidad de la zona de obras y los posibles peligros que los conductores pueden encontrar.

Las señales deben colocarse en lugares estratégicos para maximizar su visibilidad. Esto puede incluir la instalación de señales a diferentes alturas para que sean claramente visibles tanto para conductores de vehículos altos como para aquellos en automóviles más bajos. Además, las señales deben estar bien iluminadas durante la noche para asegurar su visibilidad en condiciones de baja luminosidad.

Para una señalización segura en obra fija de carretera hay que tener en cuenta estos aspectos:

  • La señalización de reducción de velocidad es de especial importancia para evitar los accidentes.
  • Las señales se irán colocando en el mismo orden en que vaya a encontrarlas el conductor, de forma que el operario está protegido por la señal precedente, y se retirarán en orden inverso.
  • Hay que emplear el mínimo número de señales para que el conductor pueda prever y realizar las maniobras necesarias, pero evitando recargar su atención con señales innecesarias.
  • Deben ser siempre reflectantes, como mínimo con el nivel 1 (según normas UNE) y se recomienda utilizar un nivel superior en lugares donde la iluminación ambiente dificulte su percepción y en lugares de elevada peligrosidad.
  • Las señales de STOP tendrán siempre, como mínimo, nivel 2 de reflectancia.
  • El color amarillo de fondo que distingue las señales de obra de las normales, solamente se debe emplear en las señales con ‘fondo blanco” las de Advertencia de Peligro, Prioridad, Prohibición y Fin de Prohibición, así como en el fondo de las señales de Carriles y las de Orientación, Preseñalización y Dirección.
  • Las señales de dirección obligatoria, cuyo fondo es azul, STOP o dirección prohibida, cuyo fondo es rojo, deberán ser iguales que las normales.
  • Se podrá señalizar horizontalmente con marcas en color amarillo o naranja, las alteraciones que se produzcan sobre la situación normal de la vía. Estas marcas viales podrán ser sustituidas por captafaros TB-10, aplicados sobre el pavimento.
  • Toda señal que implique una prohibición u obligación deberá ser reiterada o anulada antes de que haya transcurrido un minuto desde que la haya visto un conductor circulando a la velocidad prevista.
  • Todas las señales deben cumplir las normas de tamaño, distancia del suelo, distancia mínima de visibilidad establecidas por el Ministerio de Fomento.

La efectividad de la señalización fija depende en gran medida de su mantenimiento continuo. Las señales deben ser inspeccionadas regularmente para asegurar que estén en buen estado y claramente visibles. Si una señal está dañada o desgastada, debe ser reemplazada de inmediato para evitar confusiones o malentendidos por parte de los conductores.

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