En seguridad no existe el “provisional”. Las reparaciones se hacen bien

Lecciones de seguridad
En seguridad no existe el “provisional”. Las reparaciones se hacen bien

Las máquinas, los equipos de trabajo y las instalaciones pueden perder con el paso del tiempo su capacidad de funcionar adecuadamente, bien debido al desgaste o al envejecimiento o bien debido a otros factores como fallos en el diseño, en la fabricación, en la instalación, mal uso o manipulación inapropiada... Por ello es necesario, realizar reparaciones y tareas de mantenimiento que garanticen la seguridad.

Las máquinas, los equipos de trabajo y las instalaciones pueden perder con el paso del tiempo su capacidad de funcionar adecuadamente, bien debido al desgaste o al envejecimiento o bien debido a otros factores como fallos en el diseño, en la fabricación, en la instalación, mal uso o manipulación inapropiada… Por ello es necesario, realizar reparaciones y tareas de mantenimiento que garanticen la seguridad.

Pero esas reparaciones y tareas de mantenimiento hay que realizarlas de la manera adecuada, no vale hacerlas de cualquier manera, o de manera provisional. Eso puede resultar muy peligroso tanto ara las personas que desarrollan esas tareas de reparación y mantenimiento como para el resto de trabajadores que tienen que utilizar esos equipos, maquinarias o instalaciones de trabajo.

Para llevar a cabo de manera adecuada esas tareas de reparación y mantenimiento hay que seguir una serie de pasos y medidas de prevención que protejan frente a los riesgos que ese tipo de tareas pueden conllevar.

Tras la detección del fallo o avería, hay que localizarlo e identificar su causa probable. Después hay que evaluar el nivel de urgencia de la avería. Una vez autorizada y permitida la intervención deben planificarse paso a paso y establecer los medios necesarios para llevarla a cabo de manera segura:  personal, piezas, herramientas, tiempo necesario, etc…

Para planificar la reparación o intervención de mantenimiento se debe elaborar un plan que ofrezca respuesta a preguntas como:

  • ¿Qué tarea se va a realizar?
  • ¿Dónde se debe realizar?
  • ¿Cuándo se debe llevar a cabo?
  • ¿Cuánto tiempo se necesitará para realizarla?
  • ¿Quién será el encargado de velar y vigilar que los trabajos se hacen de manera segura?
  • ¿Qué formación debe poseer cada uno de los trabajadores que interviene?
  • ¿Cuál es la avería o situación que debe corregirse?
  • ¿En qué consiste exactamente la tarea a realizar?
  • ¿Qué equipos y/o materiales se van a necesitar?
  • ¿Qué medidas de seguridad se deben adoptar para llevar a cabo la intervención?

Una buena planificación y una correcta gestión de todo el proyecto serán cruciales para garantizar la seguridad de estos trabajos.

Después de realizadas las tareas de reparación o mantenimiento sobre los equipos o la maquinaria, se debe tener en cuenta varias cuestiones durante el restablecimiento del servicio. Se debe finalizar la consignación que se ha realizado en el equipo de trabajo. La consignación consiste en separar el equipo de todas las fuentes de energía y bloquearlo, disipando cualquier energía acumulada que pueda dar lugar a un peligro, verificando que todas las acciones anteriores han producido el efecto deseado.

Tras finalizar la consignación, hay que realizar las pruebas y los reglajes que fueran precisos hasta verificar el buen funcionamiento de todo el equipo una vez restablecidas todas las fuentes de energía y los medios auxiliares necesarios.

Por último, hay que registrar la avería o la tarea de mantenimiento en el histórico del equipo y realizar un análisis de cara a la planificación de futuras intervenciones, planes de mantenimiento, gestión de piezas de recambio, etc. que haya que efectuar.

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